sábado, 29 de enero de 2011

CUBA, Enero 2011

Había escuchado poco sobre la escalada en Cuba, los temas recurrentes eran el calor, la humedad y muchos mosquitos, factores clave para disfrutar poco un viaje de escalada. A pesar de eso decidimos experimentar en cabeza propia... como debe ser! Y la sorpresa ha sido más que grata, sin duda uno de mis mejores viajes de escalada! Efectivamente hacía calor (a pesar de ser invierno y de la entrada de un "frente frío"), la humedad era suficiente para que la magnesia pasara a ser un elemento psicológico y qué decir de los mosquitos, un día aplaste más de 32 (contados) mientras aseguraba.

Escalando en Cabeza de Vaca

Pero sin duda alguna mis mejores recuerdos de éste viaje son: la inigualable hospitalidad de la gente, la posibilidad de experimentar una escalada auténtica, sin importar el grado que escales, que siempre es relativo y la grandiosa compañía tanto de la nueva familia cubana como de los amigos mexicanos... sin duda todos ellos hicieron único éste viaje!

Cueva Cabeza de Vaca

Toda mi admiración al pueblo cubano y a sus escaladores, su sencillez y su fortaleza los hacen únicos, auténticos diría yo! Así que si lo único que habías escuchado de la escalada en Cuba era lo que yo había escuchado, recomendamos ampliamente hacer lo que hicimos... experimentar en cabeza propia!

La Bóveda de las Españolas

Don Raúl
Leo, justo antes de encadenar y Henry... vaya motivación!

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